Para mi y nosotras - Palabra profética

Porque vuestra casa será casa de adoración y alabanza.

No temas mi sierva, todo tiene una razón de ser. He quitado la venda de tus ojos y he colocado corilio y ahora ves. Acércate a mí más en intimidad, revelaré cosas que aun no conoces.

Juntas en unidad, en familia, clamad y ungid vuestra casa como casa de oración por las naciones, porque la gloria será manifestada allí con milagros.

Dile a mi sierva que no tema, que abriré puertas que no han sido abiertas, que eso está en mis manos, porque la boca de Jehová ha hablado en este día y vereis mi gloria.

Prepárate para hablar lo que ponga en tus labios. Clamad por vuestro padre, porque yo lo llamo como pastor de ovejas, como consejero y maestro de mi palabra, pero es necesario que clameis porque el enemigo ha querido dañar pero yo no lo permitiré si os unis en oración sin cesar.

A mi sierva Maru la colocaré muy en el alto como mujer de oración porque su corazón es un tesoro para mi.

Unios, esforzaos como guerreras. Todos reclamad pertenencia y echad al adversario y él huirá. Porque ciertamente será casa de adoración y mi Espíritu Santo se moverá allí con gran poder, dice el Señor. Moveos en mi poder, remuevo a muchos de lugares que no son agradables y les traigo hasta aquí para ser restauradas. Sacudíos del polvo que hay en vosotros y venid a mi presencia.

A ti, mi sierva Jessie te he llamado como profeta a las naciones, he hablado muy adentro de tu corazón, abrid vuestros labios y sonar trompeta.

A ti, mi sierva Diana, he llamado a la alabanza y te unjo con poder y autoridad sobre toda potestad. En medio de la alabanza ministrarás y huirán miles legiones.

- Amén